EL CARNAVAL ES UN MUNDO CAMBIANTE

Cuarta entrega de la autora, de este ciclo de notas que escribió para Últimas Noticias y que fueron publicadas durante enero de 2000, como parte de la cobertura que realizaba Carnaval del Futuro en ese prestigioso medio.

Autor: Angela Farías
El concurso reviste otras características que, ni remotamente, poseen los escenarios, empezando por el reglamento, que habilita a los concursantes a presentar dos espectáculos distintos en tiempo y forma.
Si partimos de la base que, el tiempo reglamentario en el concurso oscila entre cincuenta y ochenta minutos de duración y en los escenarios barriales promedia entre los treinta y cuarenta minutos, es fácil constatar que al espectador barrial se le está brindando un espectáculo recortado en textos, bailes, vestuario, etc. Concluiríamos que estamos frente a dos expresiones distintas de un mismo evento.
Podrá argumentare que siempre fue así y es verdad pero, antes la gente creía merecer eso y se conformaba. Hoy, el público se tornó más exigente debido a la globalización de las comunicaciones, al hecho de tener una cajita instalada en nuestras casas, mediante la cual captamos distintas señales provenientes de todo el mundo; sorprendiéndonos, diariamente, con realizaciones de indudable jerarquía y con acabadas muestras de talento.
Antes, nuestras expectativas eran otras. Todo ha cambiado dramáticamente menos los reglamentos que, si bien sufrieron algunas modificaciones practicadas por los propios directores, en otros puntos no se lograron unificar criterios.
El funcionamiento de D.A.E.C.P.U. es complejo por el contrasentido de ser arte y parte, en el concurso y en las contrataciones, de acuerdo a los mecanismos que hoy se manejan. Sus directivos -generalmente directores de grupos que compiten por los puestos de privilegio- realizan un arduo trabajo pero, deben contemplar muchos intereses, entre ellos los de los dueños o encargados de los escenarios.

El Concurso bajo la lupa

El Teatro de Verano es un fenómeno aparte. Tiene una capacidad locativa de entre cinco y seis mil personas, lo que permite registrar importantes recaudaciones. Las mismas, previa quita de los viáticos de los funcionarios y una cuota para el mantenimiento de D.A.E.C.P.U., se distribuye por categoría -de acuerdo a un coeficiente previamente establecido- y, a su vez, entre cada uno de los conjuntos participantes, según la ubicación final que hubieran obtenido.
Montar un espectáculo para un conjunto de primer nivel le significa una erogación que puede oscilar entre los veinte y los treinta mil dólares. Un primer premio le reporta, generosamente, un 50% de la inversión. La diferencia debe ser solventada por los auspiciantes, que salvo en casos excepcionales esto no acontece. En resumidas cuentas, de cincuenta participantes apenas SEIS, uno por categoría, tienen la posibilidad de EMPATAR GANANDO.
Un hecho a tener en cuenta es que la mayoría de los integrantes de los grupos no perciben paga por su actuaciones en el concurso, salvo honrosas excepciones. La “Competencia” , previa prueba de admisión para los que no hayan entrado en la “Liguilla” el año anterior, que consiste de una primera y segunda rueda y la posibilidad de la “Liguilla” significa cuatro actuaciones completas y como pago, el sudor de la camiseta… Y que la sudan, la sudan, de eso no tenemos dudas.
Quien va al Teatro de Verano, difícilmente pueda disfrutar del carnaval en los escenarios barriales de la misma forma que en el concurso.
En algo estamos todos de acuerdo, si no se adoptan medidas drásticas no se podrá revertir la tendencia que, paulatinamente, va llevando al carnaval a ser accesible sólo para una élite, desarraigándolo definitivamente de sus raíces que son los barrios.
Todas las partes involucradas tienen sus argumentos, a cada uno le asiste una cierta cuota de razón pero, deben tener presente que la situación es muy compleja y únicamente con humildad, tolerancia y comprensión, se podrá encontrar el camino.
¿En que se diferencia nuestro carnaval a otros que existen en distintas partes del mundo? La respuesta la encontrará en nuestra próxima entrega.

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